miércoles, 16 de febrero de 2011

Gracias Febo

Siempre supiste como robarme una sonrisa

me llenaste de energía.

Siempre estuviste, aunque varias veces no te vi,

me diste fuerza y calor, y yo, mi amor.

Muchas veces abuse de vos, y pagué las consecuencias.

Tuvimos buenas y malas,

yo siempre te fui fiel, mas vos estas con todos, con cualquiera.

Sos mi termómetro y mi oráculo,

centro de vida, vientre materno universal.

El fuego solo trata de imitarte